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Se le pusieron todos en contra, críticas a su forma de correr y su estilo agresivo. Pero admitió que no cambiaría y no lo ha hecho. Marc Márquez habla mucho y muy bien encima de la moto.
Nunca contento con los resultados, siempre busca una vuelta más que dé alegrías a su equipo. Ni el punto de sanción ni los comentarios de sus compañeros han evitado que el líder del Mundial roce la perfección en un circuito en el que Jorge Lorenzo inició los buenos tiempos, pero terminó devorado por el de Honda. [Así queda la parrilla del GP de Malasia de MotoGP]
Porque fue el piloto de Yamaha el que aguantó en el box después de un susto por subirse a los pianos mojados para que la pista se despejara. Había comenzado a chispear, como durante todo el fin de semana, y Lorenzo no quiso arriesgar más. Esperó a que todos los rivales entraran en sus talleres para imponer su criterio en Sepang. Solo le dio tiempo a hacer dos vueltas, pero se mostró más que satisfecho por ese 2:03.5 con el que terminó su participación. Después de que Dani Pedrosa obtuviera los mejores resultados de todos los entrenamientos, era el actual campeón de MotoGP el que estaba mas fino.
Pero con el tiempo acabado, todavía quedaban varios pilotos en pista. Entre ellos, Valentino Rossi, que había cosechado una vuelta rápida con la que logró una pole virtual a un minuto para el final y que siguió en muy buen estado de forma para lograr la segunda posición con un tiempo de 2.00.325. "Por supuesto, muy contento, pero hace muchísimo calor y mucha humedad. Lo bueno es que he mantenido el ritmo", confesó el italiano. Pudo conseguir un mejor tiempo que Cal Crutchlow, tercero en la parrilla con 2.00.348. El italiano y el inglés, como en Moto3, evitan un nuevo pleno español, pero faltaba por llegar Márquez. Y apenas lo vieron pasar.
El piloto de Honda levantó el brazo en señal de triunfo. Los números no son nada cuando se sube a la moto. En Sepang, donde Lorenzo tenía el récord logrado el año pasado, Márquez fulmino los registros al marcar un 2.00.011. Imperial el líder del Mundial, que sigue marcando las referencias. Quizá las críticas continúen, pero mañana saldrá, por octava vez en su primera temporada en MotoGP, con las miradas de todos sus rivales clavadas en su espalda. Lorenzo, cuarto, y Pedrosa, quinto, quedaron esta vez fuera de la primera línea.
La parte negativa de la jornada fue la caída de Stefan Bradl. El alemán no pudo arrastrarse bien por la grava y sufre una rotura en su tobillo derecho que le impedirá participar en la carrera del domingo. El lunes será operado en Barcelona.
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