Alonso, por delante de Hamilton en el circuito Gilles Villeneuve. (Foto: Afp)
Fernando Alonso luchó codo con codo frente a Nico Rosberg, Mark Webber y
Lewis Hamilton en el circuito Gilles Villeneuve. Tres batallas para subirse al
segundo escalón del podio, una remontada algo agridulce, porque la diferencia
con Sebastian Vettel ha aumentado hasta 36 puntos. Sin embargo, el líder de
Ferrari se mostró feliz por el resultado y por haber competido con "rivales
inteligentes y con talento".
Sin mencionarlos, Alonso lanzaba una carga de profundidad contra Sergio Pérez y Adrian Sutil, con quien tuvo más de un altercado hace dos semanas en las calles de Montecarlo. "Fue agradable competir con pilotos inteligentes, con quienes puedes competir mano a mano a 320 km/h y sentirte seguro. Estoy muy feliz por ello, ya que en Mónaco fue un poco diferente".
"El segundo puesto sabe a victoria, porque sumamos buenos puntos tras un fin de semana díficil", añadió el bicampeón mundial, que no parece muy preocupado por su déficit en la general. "Se podría hablar de una situación crítica con 85 puntos por debajo. Sin embargo, en los últimos seis años se han logrado remontar entre 30 y 40 puntos", finalizó Alonso.
De este modo, Vettel se quita la espina de 2011, cuando un error en el último giro le privó de un triunfo que parecía seguro. Entonces había firmado la 'pole', como el curso pasado, cuando no pudo aguantar el ritmo del entonces vencedor, Lewis Hamilton. "El sol ha vuelto y parece que no nos va tan mal", añadió Vettel.
También tenía motivos para el optimismo Lewis Hamilton, que firmó su tercer podio del curso con su Mercedes. "Hubiese sido bonito mantener la segunda plaza, pero Fernando fue muy rápido y resultaba difícil mantenerlo detrás", explicó el piloto de Stevenage. "Estuve a punto de recuperar la plaza, pero él tuvo ese punto de velocidad superior".
"El coche se comportó fantásticamente, con buen agarre en las curvas lentas, pero no teníamos el mismo ritmo de carrera de Seb y de Fernando", dijo el campeón de 2008, cuarto en el Mundial, con 55 puntos menos que Vettel.
Sin mencionarlos, Alonso lanzaba una carga de profundidad contra Sergio Pérez y Adrian Sutil, con quien tuvo más de un altercado hace dos semanas en las calles de Montecarlo. "Fue agradable competir con pilotos inteligentes, con quienes puedes competir mano a mano a 320 km/h y sentirte seguro. Estoy muy feliz por ello, ya que en Mónaco fue un poco diferente".
"El segundo puesto sabe a victoria, porque sumamos buenos puntos tras un fin de semana díficil", añadió el bicampeón mundial, que no parece muy preocupado por su déficit en la general. "Se podría hablar de una situación crítica con 85 puntos por debajo. Sin embargo, en los últimos seis años se han logrado remontar entre 30 y 40 puntos", finalizó Alonso.
Tachada de la lista
Al frente de la clasificación se refuerza Sebastian Vettel, que sumó para Red Bull la ansiada victoria en Montreal. "Al fin hemos podido tachar esta carrera de la lista. He tenido una buena salida y eso fue muy importante. Nuestros neumáticos superblandos saltaron pronto en pedazos, pero nuestro 'pit-stop' fue perfecto y luego pude abrir hueco para lograr un colchón de una parada en boxes sobre el resto", comentó el triple campeón alemán.De este modo, Vettel se quita la espina de 2011, cuando un error en el último giro le privó de un triunfo que parecía seguro. Entonces había firmado la 'pole', como el curso pasado, cuando no pudo aguantar el ritmo del entonces vencedor, Lewis Hamilton. "El sol ha vuelto y parece que no nos va tan mal", añadió Vettel.
También tenía motivos para el optimismo Lewis Hamilton, que firmó su tercer podio del curso con su Mercedes. "Hubiese sido bonito mantener la segunda plaza, pero Fernando fue muy rápido y resultaba difícil mantenerlo detrás", explicó el piloto de Stevenage. "Estuve a punto de recuperar la plaza, pero él tuvo ese punto de velocidad superior".
"El coche se comportó fantásticamente, con buen agarre en las curvas lentas, pero no teníamos el mismo ritmo de carrera de Seb y de Fernando", dijo el campeón de 2008, cuarto en el Mundial, con 55 puntos menos que Vettel.
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