'Escribimos para vengarnos de los malos'

Lee Child gana la octava edición del Premio RBA de Novela Negra con una nueva entrega de la saga protagonizada por el justiciero Jack Reacher, 'Personal'

El escritor británico Lee Child

 Lee Child no se llama en realidad Lee Child. Escogió su nombre de guerra (literaria) para figurar algún día en las estanterías de cualquier librería negrocriminal que se preciase entre sus admirados Raymond Chandler y Agatha Christie.

El ganador de la octava edición del Premio RBA de Novela Negra (el mejor dotado del mundo: 125.000 euros) dice que la ficción, todo tipo de ficción pero en especial la suya, sirve, entre otras muchas cosas, «para vengarnos de los malos».«Llevo años buscando la respuesta a la pregunta de para qué sirve la ficción y he llegado a la conclusión de que nos da lo que no podemos ni debemos tener en la vida real. Porque todos podemos sentirnos víctimas de injusticias en este mundo, pero puesto que vivimos en sociedades civilizadas, no podemos tomarnos la justicia por nuestra mano, y eso nos genera frustración. La ficción en ese sentido nos consuela pero también nos libera, porque nos permite vengarnos de los malos», insiste.
Lo hace desde Nueva York, la mañana en la que se falla el galardón que, por cierto, ha ganado con una novela de la serie Jack Reacher. Esto es, el caballero andante Jack Reacher, o así es como le gusta considerarlo a Lee, que descubrió que quería ser escritor de best sellers, de poderosamente trepidantes thrillers clásicos norteamericanos cuando fue despedido de su puesto en Granada Televisión. Lee era productor. Y aquello, recuerda, fue una de esas injusticias contra las que Jack Reacher lucharía.
A todo esto, la novela con la que ha ganado el RBA se titula Personal y en ella aparece un presidente francés al que un francotirador acaba de intentar asesinar.
«Recuerdo vívidamente magnicidios como el de John Fitzgerald Kennedy y Martin Luther King, pero en este caso lo que más me interesaba era el trabajo en conjunto de las agencias de inteligencia de todo el mundo, que se pondrían en marcha en cuanto ocurriera algo así. Puedo decir que todo lo que narro al respecto en la novela es cierto. Es exactamente lo que ocurriría. Tengo amigos que trabajan para diversos servicios de inteligencia y, aunque no te cuentan nada directamente porque no pueden, sí que se deduce de lo que dicen la forma en que trabajan», explica el escritor, que insiste una y otra vez en el carácter «europeo» de su héroe, europeo y «medieval». «Reacher forma parte de la larga tradición de caballeros andantes europeos que se dedicaban a salvar doncellas», dice.
En su caso, las doncellas, mujeres fuertes, porque tanto al propio Reacher como a Child le interesan las mujeres de armas tomar, no necesitan que las salven. Pero sí lo necesita el resto de la Humanidad. «No deja de ser curioso que el momento en que empecé a hacerme realmente famoso coincidiera con los días posteriores al 11 de septiembre de 2001, que fue cuando la Humanidad sintió que necesitaba un salvador», asegura el escritor, que visitará España en octubre.

 

Fuente:  EL MUNDO